jueves, 21 de febrero de 2008

Oda a Ofelia



¡Ay Ofelia mía!
caída en la desgracia
de los fantasmas ajenos
...convertida en desdicha
en tu mente febril.

Tú, querida mía,
arrojada al foso desierto,
rodeada de flores amarillas
untadas en el lago de tu ensueño
¡calamitoso panorama!
verte yacer en el espanto
incomprendida mortal..

Ofelia de mi vida,
te rezo soliloquios nocturnos
olvidándome de mis tormentos
¡el rey, mi padre, muerto!
¡Ofelia, la amada, muerta!
Y no queda venganza suficiente
que inmole al destino.

Dinamarca ha enlutado el corazón
ha vertido en tu vientre
la última lágrima;
aquella que te vio llenar la vida de agua.

¡Mi princesa ha enloquecido!

Te ha llevado el mago azaroso
con artilugios ambigüos,
impenetrables los aullidos
de los cuervos asomados en tu cuarto.
Aquel que clama en tu ausencia,
desprovisto de la femenina fragancia de tí,
mi Ofelia.

¡Ay Ofelia mía!
Desconsiderada en vuestra ambivalencia,
me dejas solo con el destino cruel
y el reinado solitario...

No me sonrías así,
esperadme junto a mi padre...
Te aclamo en mis llantos
te sigo en tu delirio
te sigo post-mortem,
convirtiendo el polvo en polvo.

6 comentarios:

Enrique de Santiago dijo...

Como dije en mi respuesta: ¿Quien eres Amaranta? ¿Por que llegas con este inmenso canto funerario, a mi pira que se alza en el centro de mi alma' ¿Por que creas un blog, y remueves el dolor que trato de dejar inmovil? ¿Que sabes de mi desgracia de ser un Hamlet? Desgracia que cada ser vive en su vida, cuando encuentra el amor ünico e irrepetible, y lo ve arrebatado por el infortunio y la locura, que lo sumerje en el lago.
¿Por que a mi, Amaranta?
Que voz, proviene, de un lugar en una hora de espanto, que lacera el vientre inconcluso, de un deseo.
No había recibido nunca, visita tan inquietante, ni escrito tan coincidente, o evidente, ¿intencional? ¿O debo sumirme en el sueño para develar tu rostro, que no posee perfil?
Padezco, un dolor, de ver sumergirse en las aguas, el amor que solo conoce en su magnitud el inefable, un transito delicado arrebatado por la locura de aquella, que ofrenda en la transparencia del agua, su miedo, que no es otro, que destinarse a huir. Llamando a la tragedia, a un designio que contraría tamaña desdicha. No hay ajedrez, ni piezas, ni manos atadas, existe la estupidez de dar vuelta el tablero dispuesto para la vida.
Nadie puede hacer un lazo y quedar fuera del mundo, cuando el mundo te llama a gritos a ser y obrar por tu destino.
El suicidio, no por acción, sino por dejarse morir, es más impresentable, por haber tenido en la vida y en su poder la sabiduría que se desecha.
Me conoces Amaranta, recuerda que todo es un plano continúo, donde iré a saberte.

Gonzalo Del Rosario dijo...

QUE BELLEZA DE POEMA

"Ofelia de mi vida,
te rezo soliloquios nocturnos
olvidándome de mis tormentos
¡el rey, mi padre, muerto!
¡Ofelia, la amada, muerta!
Y no queda venganza suficiente
que inmole al destino"

QUIEN SERA TU OFELIA

ESPERO LLEGAR A CONOCERLA

Anónimo dijo...

Hmmm...

Sencillamente hola.

Dedo Idiota dijo...

mmm tendrás las siete llaves... o sabes algo sobre mi... que yo no????. saludos

Enrique de Santiago dijo...

Carmen:¿Tu también aquí?
¿Cuales siete llaves?
Y Amaranta es muda

Enrique de Santiago dijo...

Luego de un largo periplo, se quien eres, equivoqué el tranco al principio, pero el sueño me trajo tu rostro, lo siento, no soporto que algo se oculte, soy un obsesivo
aunque no contestaste mi mail.